Siete años después, en contra de lo que Ashley y Dasyan quisieran, su amor sigue vivo.

Ashley Dawson ha pasado siete años de su vida prácticamente aislada del resto del mundo bajo la protección de Seth, uno de los Durstads más poderosos. Cansada de estar recluida y deseando llevar una vida normal ha preparado durante ese tiempo su huida.

Ahora, con otro aspecto y una identidad falsa, Ashley recorre el país buscando alejarse tanto de los peligros que la acechan como de aquellos que la quieren proteger, pero que le impiden llevar una vida normal.

Para los Durstads es de vital importancia dar con la joven. Ella sigue siendo una pieza fundamental en el plan de los khandishan de volver a materializarse entre los humanos; será Dasyan el encargado de buscarla y ponerla a salvo... de nuevo.

Cuando por fin la encuentre Dasyan apenas reconoce a la joven de la que una vez se enamoró profundamente y tendrá que luchar no solo para protegerla de las terribles fuerzas que la amenazan, sino también para protegerse a sí mismo de los sentimientos que ella parece despertar en él con tanta facilidad y que no tienen cabida en el papel que ambos tienen asignado en contra de sus voluntades.