El comendador de Fuente Ovejuna comete tales atrocidades contra mujeres y hombres, que todos los vecinos asaltan la casa de la Encomienda, dan muerte al tirano y se reparten sus bienes.
De la corte llega un juez para instruir el proceso contra los habitantes del pueblo. Ni con la tortura consigue que contesten a la pregunta «¿Quién mató al Comendador?» otra cosa que: «Fuente Ovejuna lo hizo, Fuente Ovejuna, señor». Esta historia de venganza y rebeldía estaba inspirada en un hecho real.