Después de escribir mi primer libro Memorias de un inmigrante y vivir las experiencias que se dieron a raíz de su publicación, comprendí que lo mío había sido un impulso atrevido que me había permitido comprobar una vez más mi naturaleza interior. Sentí una felicidad inexplicable, natural diría mejor que tiene que ver con toda creación. De igual forma percibí claramente los errores que había cometido pero lo hice y me siento feliz de esa realidad. Dios es grande e iluminó mi mente. Puso en mi camino a seres especiales que con energía positiva me alentaron e inspiraron surgiendo la idea de escribir nuevamente para compartir con ustedes y las futuras generaciones este trabajo que entrego con mucho cariño. Hoy, después de veinte y dos (22) años de perseverante labor creo haber logrado ese cometido. Durante todo ese tiempo disfrutamos y complacimos a nuestros nietos y a la familia. Dedicación, esfuerzo y responsabilidad permitieron que se logre un día tan importante en nuestras vidas. Estoy convencido que solamente se logra por el cariño que sientes por los tuyos. De todo corazón deseo que todas las familias gocen de la unidad familiar apoyada en el apego y que disfruten de las recetas que les presento, las cuales contienen el ingrediente mágico del amor para que lo disfruten en este Miércoles día de Familia