La palabra forjada en el yunque invisible de la poesía, que será nuestra voz cuando todas las voces se desvanezcan solución única para que crezca nuestro sueño inalienable, en este yermo de palomas muertas, única fórmula para resolver la ecuación del Ying Yang, del hombre demonio y ángel. Del hombre nuestro inalienable cuya vida debemos proteger cómo el patrimonio y el tesoro más querido que tantos millones de años ha costado obtener. Yo, un modesto servidor de la palabra liberada, nací entre la luzu de Calasparra y las aguas verde berilo, del Thader, cerca del beso del "Benamor" y de la madera embreada por los pinos del "argos" y la sal de Quipar - y en agua y luz mediterránea, con el bagaje llegué un día a Madrid y aquí inventé mis milagos... mi esposa, mis tres hijos, mi profesión de abogado y paleta y mi cálamo... Todos milagros... Anclas, raíces, velas y hojas: Un resumen de la vida de un poeta.