La patria es una raíz y un destino , escribió Eduardo Galeano en un artículo titulado, muy significativamente, Prohibido olvidar . Guste o repugne, nuestra raíz distintiva son los canarios precoloniales , y nuestro único destino mejorador está en la digna capacidad de comportarnos como pueblo responsable y no sojuzgado. Esta dignidad solo será posible con la independencia solidaria. No solo con violencia homicida se gana un pueblo el respeto. ¿Tiene cabida el pacifismo fecundo en la pugna por mejorar la situación del pueblo al que perteneces? El conocimiento te hace sentir de una manera distinta a la ignorancia, por eso se nos dificulta el conocernos: para que nos sintamos lo que no somos y para podernos mangonear mejor.