La obra constituye una exploración, por parte de la persona poética, de un conflicto en el que se enfrenta a su propia ignorancia, a la inclemencia de las fuerzas naturales y a la de sus fantasmas internos y que espera resolver gracias a la compañía de sus semejantes y al hallazgo de relaciones que le permitan disfrutar de su dignidad humana, así como ayudar a otras personas a hacerlo. Con influencias del romance y el teatro clásico, combina la cadencia de una poesía musical con un estilo más cercano a la estructura del habla, aunque conservando un lenguaje culto. Intenta plasmar sentimientos y perspectivas diversas acerca de la vida. El poemario va acompañado de un trabajo fotográfico profesional.