En esta obra se dan, al tiempo, muchas historias que se pueden leer por separado (como indica el autor en su Prólogo de andar por casa), o de manera unitaria como una novela unida por nexos comunes. Estas cinco historias entretejidas forman una obra en la que la prosa de García Ramos alcanza su cima lírica.
La historia de los Tamaimos, pequeños seres prehispánicos habitantes de la isla; la del mencey guanche que exterminó a todos sus enemigos y se sintió solo; la del abuelo que hizo la fortuna a base de esfuerzo y sacrificio; la de la mujer enamorada de dos hombres tan distintos pero hermanos entre sí; la del opositor a los registros catastrales…
Alfonso García-Ramos narra las peripecias familiares a través de una compleja maraña de situaciones y personajes, que maneja y conduce con extraordinaria habilidad, con extraordinario conocimiento del alma humana.