En la segunda mitad del siglo XVI se consolido una significativa evolución del Derecho penal-penitenciario por ahora, no de los soberanos, sino del trabajo de determinados juristas de la práctica que, influidos por la doctrina del Derecho romano, contribuyeron a la lenta pero inexorable superación del carácter local ya autónomo que hasta entonces ofrecía el sistema carcelario y que a partir de ese momento tendería a la objetivización de la práctica jurídica y la jurisprudencia práctica; a la observación, por parte de los jueces y los tribunales, de la cualificación y la conducta necesarias para el desempeño de su oficio; y a la aparición de un incipiente sistema de garantías para los presos. Entre los hombres y las obras que articularon este proceso ocupa un lugar muy destacable La Visita de la cárcel y de los presos del jurista valenciano Tomás Cerdán de Tallada quien en la temprana fecha de 1574 puso en circulación un planteamiento precursor en relación con la moderna ciencia penal-penitenciaria. Al análisis de dichos espacios, dichos problemas, y dicho protagonista se ha dedicado el presente trabajo que incluye la edición facsímil de la primera edición de La Visita.., como obra que, indudablemente, ha tenido en nuestros días menos atención de la que merece.