Agustín García Delestal
Hace años, caminaba el autor por las proximidades de Abadía, un pueblecito del norte de Extremadura, y, de pronto, para su grata sorpresa, se encontró frente a un edificio en ruinas situado en medio de una llanura ornada de encinares, escobones, jaras y tomillos, situada junto al río Ambroz. (...)